Bolsos Bottega Veneta: Leyendas Vivas de la Artesanía
Cuando Michele Taddei y Renzo Zengiaro fundaron Bottega Veneta en 1966, con su posterior lanzamiento en el 67, tenían una visión clara: hacer de la artesanía una marca. Más de 50 años después, los bolsos Bottega Veneta se han convertido en el icono de la marca. Su diseño es impecable; su confección, magistral, y su acabado, inconfundible.
Los bolsos de la firma cuentan historias. Historias de la casa, de sus directores creativos, de momentos inolvidables para la marca, etc. También hablan de constancia y esfuerzo, sosteniendo el alma de la casa en un pasado con un origen difícil. En los 70 y 80, al poco de ponerse la firma en funcionamiento, Taddei y Zengiaro pensaron abandonar el proyecto.
El poder de la persistencia
Ambos habían ya superado sus limitaciones iniciales, inventando una nueva técnica de tejido con el cuero que les permitía trabajar con la maquinaria de la que disponían. Su legado: el intrecciato. Este se convertiría en el símbolo principal de la marca, más allá de logos (o su ausencia), nomenclaturas o imaginario. El intrecciato, el trenzado tan particular del cuero de la marca, dio un empuje inicial a la firma para convertirse en favorita de las élites occidentales. Jackie Kennedy y Andy Warhol estaban entre sus mayores fans, pero las cosas no serían del todo fáciles para Bottega al principio.
Su excesiva discreción y el desconocimiento general del público fuera de la jet, sumada a la preferencia por la moda exuberante y excesiva de los 80, provocó pérdidas a la marca hasta el punto de querer abandonarla. Pero entonces, la mujer de Taddei, Laura Moltedo, tomó las riendas de la marca con la idea:
Si trabajamos con consistencia, nuestro momento llegará.
Su filosofía no es solo un gran lema de crecimiento personal, sino la responsable de una de las marcas que ha definido la moda del siglo XXI. Tras lanzar una línea de ready to wear en los 90 para la marca, contó brevemente con el trabajo de Giles Deacon, y desde 2001 con Tomas Maier. Y ahí comenzó el ascenso legendario de Bottega.
El Cabat y el Knot
Lanzado en 2001 para convertirse en un símbolo de la marca, el Bottega Veneta Cabat bag fue el primer bolso diseñado por Tomas Maier, y el primero con nombre propio. Este modelo lleva en la marca desde su primera aparición, y consiste en un capazo generalmente monocolor confeccionado a mano con el intrecciato de la marca. Sus distintos tamaños y su diseño espacioso lo volvió enseguida un favorito de la jet, pero el trabajo de Maier iría mucho más lejos.
La entrada de Tomas Maier en Bottega Veneta fue crucial para asentar las bases del Bottega actual. Prosiguiendo el ready to wear de la marca que inició Laura Moltedo, Maier quiso centrar la atención de la casa en su proceso artesanal made in Italy, y para conseguirlo fundó la primera escuela para futuros artesanos de Bottega. Desde entonces, los bolsos que hoy día llevamos y mostramos en tienda, son fabricados a mano por personal formado en la escuela de artesanía de la marca.
Tomas instauró uno de los dos símbolos inconfundibles de la marca: el knot. Este nudo realizado en metal es una oda al compromiso artesanal de la casa, donde todos sus accesorios se fabrican a mano cuidadosamente. Este emblema se volvería clave en la casa hasta la actualidad, nombrando a un bolso (el conocido Bottega Veneta Knot clutch), adornando múltiples piezas de la casa e incluso sirviendo de tapa para el primer perfume de la casa.
El Cassette, el Pouch, el Lauren y el Jodie
El relevo de Daniel Lee en Bottega Veneta (2018) fue el punto clave para que la firma pasara de un icono discreto a un referente de la cultura popular. El timing y la asociación con celebridades del momento convirtió rápidamente a la marca en un éxito. Y, evidentemente, la nueva generación de bolsos Bottega Veneta fue la gran responsable de este ascenso.
Es aquí cuando surgen algunos de los bolsos que seguramente reconozcas más rápido. En la primera colección de Daniel Lee para Bottega Veneta, en febrero de 2019, conocimos el Bottega Veneta Cassette bag y el Pouch. Ambos un éxito de ventas instantáneo, los vimos en las manos de las grandes musas de la industria.
Poco después, conocimos el bolso Jodie, un modelo reimaginado desde la era de Tomas Maier. En una ocasión, Jodie Foster se cubrió la cara de los paparazzi con un bolso Bottega formato hobo. Este momento dio nombre al nuevo bolso Jodie de Bottega. El Jodie es una reinterpretación de un clásico bolso de hombro de la firma con forma slouchy. A este se le añadió un nudo en el asa y se lanzó en diversos tamaños, desde el mini hasta el maxi, con hasta 4 variaciones en el medio.
El bolso Cassette ha vivido también muchas revisiones, con todo tipo de acabados, tejidos y formatos, pero siempre manteniendo un diseño reconocible. Se trata de un bolso de hombro o cruzado muy fácil de llevar, espacioso y reconocible.
En 2020, vimos un relanzamiento de otro clásico: el Bottega Veneta Lauren 1980. Este bolso se llama así por la película American Gigolo, en la que la actriz Lauren Hutton llevaba un bolso de Bottega con un diseño idéntico. Se trata de un bolso de mano versátil y lujoso, excelente como bolso de día para ciudad o como bolso de fiesta.
El famoso Arco de Bottega salió en 2019 de la mano de Daniel Lee, lanzado en distintos tamaños y materiales. El modelo central es un tote bag con cierre de lazada de cuero, usualmente con un neceser del mismo color como complemento. A día de hoy, se ha convertido en un clásico de la casa.
El Sardine, el Andiamo, el Hop, y el Kalimero
Con la llegada de Matthieu Blazy en 2022, se produjo la salida del primer bolso viral del diseñador: el bolso Sardine. Elaborado a mano con forma de media luna y un asa metálica en forma de sardina que le da nombre, es un bolso que ya se ha convertido en un símbolo del nuevo Bottega desde su lanzamiento.
En la primera colección también conocimos al Kalimero, un bolso de tejido cuero/foulard con fibras anchas, que le da un aspecto artesanal, más bruto y único.
El Hop y el Andiamo salieron al final del 2022, y se volvieron un indispensable del 2023. El Andiamo, (en italiano, ‘’vamos’’), se situó a la cabeza de la nueva tendencia de los maxi bolsos. Gracias a sus tres tamaños, todos espaciosos, adornados por el famoso knot y un asa para los hombros, el bolso hace honor a su nombre al ser ideal para su uso diario y para viajar.
El bolso Hop hace homenaje a las siluetas relajadas de bolsos como el Jodie original, pero con una base angulosa y un diseño triangular. El triángulo, como símbolo de la casa (representa la V de Veneta), está presente en el diseño y herraje de algunos de estos bolsos, como en el caso del Cassette.
Así, las técnicas tradicionales de la firma se han convertido en el punto clave de la casa. Con el intrecciato en el centro y un largo camino en investigación de materiales, la marca se mantiene al frente de la industria por su diseño innovador. Todo arraigado en un amor profundo por la artesanía.
