Ropa de Self-Portrait mujer

Una sensibilidad artística particular es lo que llevó al diseñador Malayo, Han Chong, a vivir el viaje de su vida. Tras graduarse de la prestigiosa Central Saint Martins en Londres, se siguió desarrollando como artista e individuo en la gran ciudad hasta llegar a exponer su obra en la edición 53 de la Biennale de Venecia. Tras semejante logro artístico, lanzó su propia marca Self-Portrait en 2013 para que su perspectiva y sensibilidad llegasen a mujeres de todo el mundo.

Su trabajo aspira a vestir a la mujer durante toda su vida, en ocasiones grandes y pequeñas. Una perspectiva cercana y familiar del lujo es parte de su enorme éxito. Su intención de hacer la ropa de diseñador accesible para más mujeres va en línea con la nueva generación de creativos que juntan su creación con conciencia de la sociedad.

A través de su proyecto, financia el trabajo de nuevos artistas y nuevas marcas emergentes, ayudando a otros a crecer y democratizando oportunidades para los nuevos aspirantes a la industria.

Self-Portrait ropa en Ottodisanpietro

Los vestidos Self Portrait plantean una belleza singular a la vez que universalmente aplicable, para que toda mujer pueda encontrar una faceta suya en sus vestidos. Con alta calidad y versatilidad, todo sobre una propuesta genuina, se vuelve una firma perfecta para Ottodisanpietro. Bordados e incrustaciones, capas y cortes en tul, nuevas gamas cromáticas y diseños inusuales lo hacen un favorito de nuestras clientas. Esto se traduce en una amplia selección de opciones para cualquier tipo de circunstancia. Sus lookbooks suelen retratar iconos globales del estilo, contextualizando en la vida urbana la universalidad de sus diseños.

Las piezas de Han Chong aportan exploraciones del color y las texturas, trayendo su nueva sensibilidad y atención al detalle a nuevas y clásicas siluetas de vestidos de fiesta. La marca es ideal para cualquier tipo de ocasión formal (como bodas y graduaciones), o celebraciones más familiares e informales como cumpleaños o la época de fiestas. Esto es así por su versatilidad única, demostrando que el proyecto de Han funcionó como él lo había soñado.